¡¡Hola chicos!! ¿Cómo lo lleváis? Poco a poco iréis acostumbrandoos a esta situación que nos pilla por sorpresa a todos y que dentro de unos años aún seguiremos recordando.
Para facilitaros la labor de acordaros de todo esto dentro de muuuucho tiempo os propongo la siguiente tarea para hacer durante todo este período: UN DIARIO.
Todos sabéis lo que es un diario: un registro de lo que nos pasa a lo largo de un día, pero escrito de forma continuada, todos los días. Pues vamos a ello.
1. Antes de nada: no valen excusas de "yo no tengo un diario". No te hace falta: busca una libreta vieja, arranca las hojas que no te hacen falta...y ya tienes diario. Ahora puedes personalizarlo a tu gusto (fórrala con papel de regalo usado, usa lazos, pegatinas, dibuja...) Te aconsejo que dejes un marco para, el último día, ponerle un título porque, quizás ahora, te salgan sólo títulos negativos.
2. Márcate una hora todos los días para escribir. Tienes que ser disciplinado: no puedes acumularlo todo para un día porque te habrás olvidado de detalles y, precisamente, lo que queremos es que recuerdes el mayor número de cosas de esta época.
3. Escribe todo aquello que consideres relevante. cómo te sientes, cómo te ha cambiado la vida, qué has hecho de especial, cómo está la gente que te rodea, con quiénes has hablado ese día...
4. No te limites a escribir. Puedes incorporar todo tipo de materiales. Por ejemplo, si has hecho una receta de cocina, cópiala; si has visto una película, prueba a buscar la ficha de esta (título, año, actores y argumento). Lo mismo con los libros. Si te han contado un chiste que te hizo mucha gracia, anótalo también...
5. Echa a volar tu imaginación. Todo vale: cambiar de letra, de colores, dibujos, todo aquello que signifique algo para ti. Se trata de conservar el recuerdo.
6. Cuando llegue la normalidad, os pediría que trajeseis vuestros diarios a clase, así veréis que no sois los que peor lo estáis pasando y que, en el fondo, este confinamiento os habrá aportado una experiencia insustituible.
Aquí tenéis ejemplos de lo chulas que os pueden quedar vuestras hojas (pero no las rellenéis demasiado. Ya sé que soy una pesada, pero recordad que además de la estética, lo que importa es el contenido de ese diario).
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