domingo, 3 de febrero de 2013

"PODEROSO CABALLERO ES DON DINERO" ( y ya hace siglos que se veía venir)

Imágenes tomadas de la Fundación Francisco de Quevedo
Puede considerarse imperdonable no haber dedicado hasta ahora una entrada a uno de los genios de nuestras letras, a don Francisco de Quevedo y Villegas cuya extensísima obra, en la que dio cabida a la filosofía, el amor, la sátira, la reflexión, la crítica literaria... hace que todo lo que se diga sobre él o todos los comentarios que se le dediquen palidezcan al lado de su producción.






La elección de este poema es casi obligada en los días que vivimos  cuando estamos alarmados, decepcionados, cansados por tanto escándalo, corruptela, duda sobre la honradez de nuestros políticos...Eso sí, lo de cualquier tiempo pasado fue mejor viene al pelo en este caso, cuando la falta de honradez de los validos y gobernantes motivaba versos tan agudos como estos.

Bien sea por las circunstancias actuales, bien sea porque cualquier momento es bueno para acercarse a los clásicos, bien sea porque Quevedo siempre merece que le dediquemos un par de minutos, aquí teneis este famosísimo poema de "Poderoso caballero es don Dinero". 



Madre, yo al oro me humillo,
Él es mi amante y mi amado,
Pues de puro enamorado
Anda continuo amarillo.
Que pues doblón o sencillo
Hace todo cuanto quiero,
Poderoso caballero
Es don Dinero.
Nace en las Indias honrado,
Donde el mundo le acompaña;
Viene a morir en España,
Y es en Génova enterrado.
Y pues quien le trae al lado
Es hermoso, aunque sea fiero,
Poderoso caballero
Es don Dinero.
Son sus padres principales,
Y es de nobles descendiente,
Porque en las venas de Oriente
Todas las sangres son Reales.
Y pues es quien hace iguales
Al rico y al pordiosero,
Poderoso caballero
Es don Dinero.
¿A quién no le maravilla
Ver en su gloria, sin tasa,
Que es lo más ruin de su casa
Doña Blanca de Castilla?
Mas pues que su fuerza humilla
Al cobarde y al guerrero,
Poderoso caballero
Es don Dinero.
Es tanta su majestad,
Aunque son sus duelos hartos,
Que aun con estar hecho cuartos
No pierde su calidad.
Pero pues da autoridad
Al gañán y al jornalero,
Poderoso caballero
Es don Dinero.
Más valen en cualquier tierra
(Mirad si es harto sagaz)
Sus escudos en la paz
Que rodelas en la guerra.
Pues al natural destierra
Y hace propio al forastero,
Poderoso caballero
Es don Dinero.
El cambista y su mujer, Marinus van Reymerswaele

1 comentario: